Diferencias entre bañado y chapado en oro

El bañado y el chapado en oro presentan una gran diferencia que has de saber apreciar. Desde el proceso por el que se crea una joya hasta su durabilidad están determinados por la cantidad de oro que contiene. Las técnicas mediante las que se introduce este metal precioso en una joya son muy diferentes, ya que dependen de si se hace con la aplicación del baño o con la incrustación de una lámina.

¿Reconoces qué es un baño o un chapado en oro?

La primera forma de distinguir un baño de un chapado consiste en mirar la cantidad de oro en una pieza de joyería. Cuando decides cubrir una pieza con un baño, vas a requerir entre 0,1 y 0,3 micras de este material con composición líquida.

El resultado es una capa bastante fina que, sin duda, le da a la joya un aspecto elegante y, por supuesto, hace subir su precio en el mercado. El baño en oro es muy demandado por un público que no puede pagar un mayor coste por este material, pero que busca una joya que impresione y se distinga del resto de la bisutería.

A simple vista, no existe ninguna diferencia entre una joya con baño de oro y otra que esté chapada. En este caso, como especialista joyero, deberás buscar el indicativo grabado en la joya que muestra la cantidad de oro. Así podrás identificar un chapado.

Este consiste en incrustar una capa de oro de 1 a 10 micras. De la misma forma que lo has aplicado en una pieza de joyería, el chapado también lo puedes retirar, aunque ello implica la intervención de un profesional orfebre.

Cuando se chapa una pieza, por lo general, se elige un material metálico, que puede ser cobre o plata. Al contar con un grosor mayor en el chapado, estamos garantizando un aumento de la durabilidad de la joya.

El baño, por su parte, suele tener una duración más limitada. Aunque le puedes dar un buen uso y lograr que dure muchos años, como si la joya fuese nueva, esta puede ir desgastándose y perdiendo esa capa de oro con el tiempo.

El continuo roce y la exposición a la lluvia o el sudor son algunos factores que harán desgastar el oro de una joya, tanto si posee un baño como un chapado. Al final, el grosor de este material será determinante, así como las precauciones que tengamos.

Ten en cuenta que, si quieres la completa satisfacción de un cliente, será un requisito necesario que indiques la cantidad de oro con que está fabricada una joya, así como si posee un baño o está chapada.

Técnicas para realizar el baño y el chapado en oro

El chapado y el baño en oro usan diferentes técnicas para lograr la joya final. A continuación, te las describimos para que las tengas en cuenta a la hora de realizar una pieza de buen gusto.

Chapado en oro

Uno de los métodos más comunes en la joyería es cubrir una superficie metálica con una lámina de oro. En este caso, puedes usar dos modalidades: con electricidad o con productos químicos. El resultado será una fusión perfecta de la capa metálica con el oro. A veces, sobre la plata o el cobre, necesitarás una pieza metálica intermedia para perfeccionar la unión con el chapado.

El chapado en estante es otra técnica que consiste en colgar las joyas en una especie de estante que termina sumergido en una solución química. Esta logra la fusión del oro con el metal de la joya. Al cargarse este último con iones negativos, atrae las partículas de oro. Es posible que necesites repetir este procedimiento varias veces antes de conseguir su unión completa. El proceso suele finalizar con la aplicación de una corriente eléctrica que fija por completo los diversos materiales.

Por último, el chapado electrónico es más habitual en el mundo de la decoración. Por lo general, se utiliza el níquel para crear una barrera metálica sobre los componentes de cobre. Gracias a esta técnica de chapado, podemos obtener diversos niveles de oro, los cuales van desde el puro hasta el denominado suave.

El bañado en oro

Aunque no es muy diferente del chapado en lo que se refiere a la técnica para aplicarlo, se caracteriza por la menor cantidad de oro que se emplea.

El baño o recubrimiento electrolítico necesita de un catalizador y de una solución química. A su vez, esta puede ser alcalina, con sulfato, con ferrocianuros, neutra o ligeramente ácida. Cada profesional elige el procedimiento en función de la pieza que vaya a usar.

En conclusión, el baño y el chapado en oro, si bien muestran su mayor diferencia en la cantidad de material que has de emplear, usan métodos muy similares para lograr ese aspecto que tanto llama la atención del comprador.

Recuerda que en nuestra tienda online dispones de una multitud de productos y herramientas para joyería como limpia plata, bigornias, limatones, etc.

Comentarios (0)

Todavía no hay comentarios
Product added to wishlist
Product added to compare.

Utilizamos cookies propias y de terceros para obtener datos estadísticos de la navegación de nuestros usuarios y mejorar nuestros servicios.